Poemas

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Días lentos

Días que lentos resbalan
Largas noches preñadas de recuerdos
Rosario interminable de añoranzas,
Crepúsculo naciente
Del final que se acerca inexorable.,

Duro es vivir la calma y el retiro
Después de tanta vida.
Duro es mirada perdida
En horizontes lejanos
Sin ambiciones, sin soñares locos.

Sólo la calma te abriga
loco que soñaste tanto
Que viviste tantos ciegos desafíos
Esparciendo sobre vidas y quereres
Desatinos, desvaríos.

Hoy que la calma te invade
Buscas sueño, impotente, desquiciado
Caminando cabizbajo
Por caminos sin salida, tortuosos
Como tu mente, cansados.

Ni tu pluma ni tu voz ni tus cantares
Encuentran eco sentido
Ni tu mente oye el chillido
De la vida que te grita: No te pares,
Sigue mirando hacia el cielo
Sigue rimando soñares

Grita canciones de anhelo
No te envuelvas en pesares
Deja el alma proseguir su loco vuelo.
Joven el alma persiste
En su afán de devolverte tu locura
Cuerpo que te arrastras triste
Corre, grita, sueña, rompe tu amargura.

Es el aire enamorado de tus canas
Que acaricia tus andares
De su soplo , borracho de esperanzas.
Entre el otoño y nuevas primaveras
De soles y de mares

Alma, despierta de tu negro invierno
Vuelve a cantar la vida y los azares
De jóvenes locuras,
Vuelve a reír de llantos infantiles
Vuelve a vivir y a soñar.
Tan lejos va el invierno
Como la voz de tus caminos blancos
En medio del cantar.

Rima nuevas auroras,
Grita nuevas y locas ambiciones
Tan lejos el invierno irá llorando tus canciones
Como la nube abierta llora sobre el río
De tu vivir sereno
Entre el verdor de la campiña verde
Y el polvo del camino.

Lejano va el invierno
Lejana va la meta del destino
Mientras la mente canta vidas nuevas
Y el alma sueña, loca, amaneceres
De mañanas azules y de sol.
Sigue; poeta; soñando
Sigue gritando vida cara al cielo
Lejano irá el invierno
Serena irá la vida y las estrellas
De nuevo brillarán.